El Farol restaurante muy lento

SR. FCO. MORA créame que no es el único que ha vivido una situación similar, yo tuve un percance terrible y casi caótico aquí en mi natal Tlaxcala:


Mi situación no fue en una taquería, fue en un restaurante chino, pedí teppanyaki y carnitas rojas, pero paso veinte minutos y no me traían mi comida, pasaron treinta minutos y nada aun, paso una hora y nada, paso una hora y media (ya las tripas me rugían) me encabrone y casi tuve que arrinconar a un mesero (pues se movían rápido y se hacían majes) ya arrinconado le dije molesto: ‘’¿¡quiubo mano!? ¿¡hasta cuando me van a tener esperando como pend#@!?’’ el chino puso cara de perro arrepentido y me dijo la razón de la tardanza (me lo dijo con acento chino tratando de hablar español): ‘’jefe de cochina desil que no entlegale nada, que mejol se vaya a otlo restaurante’’ y yo le dije: ‘’¿A si? A ver.. ¡vamos a ver al jefe de cocina!’’ me aproxime a la cocina, abrí las puertas de golpe y vi chinos preparando la comida…¡y no manches, que pinche asco! Con un soplete estaban quemándole los pelos a ratas muertas y a perros muertos, y los preparaban como si fueran pollo o res, (casi vomito) fue entonces que todos ellos me miraron asustado y yo dije en voz alta: ‘’¿¡quién chingados es el jefe de cocina!?’’ mi pregunta fue respondida por una risita chillona, se oyeron pasos, y de una Almacen que parecía ser el refrigerador, salió otro chino, pero este no era desconocido para mí: en mis años mozos estudie con un legendario maestro conocido como Yip Kai Man, quien me enseño el jeet kune do (tecnica marcial usada por bruce lee) fui su mejor alumno, pero había un alumno de el que me tenia una insana envidia, su nombre era YUAN KIN PIN, una vez trato de darme una golpiza en las afueras de la escuela, pero lo vencí y humille delante de sus amigos, inclusive el gran YIP KAI MAN, lo corrió de la escuela por conducta violenta, desde ese día me juro venganza, y ahí estaba de nuevo: era un chino de un metro ochenta más o menos, de complexión ‘’robusta’’ (gordo para que no se confundan) tenía la barba larga negra y enmarañada casi como san Nicolás, y una mirada de loco descomunal, me miro y yo lo mire, él dijo en chino a sus cocineros que se hicieran a un lado, entonces los chinos nos rodearon formando un circulo, el malvado yuan kin pin, tomo dos cuchillos de cheff de cocina y se puso en posición de combate, yo me quite mi camisa y deje a la vista el tatuaje que tengo de mi virgencita de la asunción, en mi espalda (me encomendé a ella) y me puse en posición de combate también, nos miramos y entonces yuan kin pin soltó un grito animal y corrió hacia a mi con sus cuchillos, fue entonces comenzó el combate:
Aquel lunático me empezó a dar estocadas rápidas con sus cuchillos, me fue fácil esquivarlo pues era lento y yo rápido, y con un movimiento de mis manos tome uno de sus cuchillos y lo lanze lejos de el (ahora tenia un solo cuchillo) este entonces me lanzo el que le quedaba con intención de clavármelo en la cabeza, pero con dos dedos de mi mano lo atrape En el último instante antes atravesara mi cabeza, yuan kin pi encolerizo y comenzó a atacarme con la técnica conocida como: ‘’ El tigre mojado’’, y comenzó a darme unos buenos golpes, me cubrí pero me causo bastante daño, esto me dejo en el suelo, escupí sangre y me levante de nuevo, fue entonces que fue mi turno de contraatacar: con los años desarrolle mi propia técnica de combate: ‘’La Asunción de las treinta y cinco palmas’’ es una técnica en la cual al tener al oponente cerca, lo golpeo en treinta y cinco puntos del cuerpo que cortan las energías (o chakras) dejando Fuera de combate al peleador que sea de la complexión que sea, pero para esto se requiere velocidad y destreza, entonces adopte la posición para mi técnica: ‘’la sagrada asunción’’ yuan kin pin desconocía esta pose, se confió y adopto la legendaria posición del ‘’jabalí endiablado’’ y se dispuso a atacarme, cerré los ojos y espere a que estuviera a la distancia perfecta, y cuando lo tuve aplique mi técnica: lo golpee con dos dedos de cada mano los treinta y cinco puntos, yuan kin pin quedo paralizado, le di la espalda y entonces yuan le empezó a escurrir sangre por los labios volteo los ojos y cayo de espaldas al piso como un costal de papas (parecía ballena arponeada) los otros chinos quedaron asustados e impactados, se hincaron ante mí y me decían al unisonó: ‘’¡maestlo! ¡maestlo! ¡maestlo!’’ no les preste atención, me puse mi camisa y me fui de aquel inmundo lugar… ¡pero! Primero lo primero: denuncie el local a salubridad, espere a las autoridades, y hubo un cateo masivo, vi como llevaban a yuan kin pin en un a camilla, y a los otros chinos arrestados, se me acerco el comandante de policía me puso su mano en mi hombro y me dijo: ‘’Alfonso, eres un buen hombre’’ yo le conteste: ‘’lo se comandante…lo se’’ me fui a la parada a esperar el camión, y me deleite viendo la puesta de sol, feliz de haber vencido a mi enemigo y de darle otra victoria a mi sagrada virgencita de la asunción.